Esta es la frase que pronunció Galileo Galilei después de abjurar de su visión heliocéntrica del mundo ante el tribunal de la Santa Inquisición (muy probablemente después de abandonar la sala...).En este caso, debemos decir al contrario.
Mirando fijamente la imagen, da la sensación de que todos los cuadraditos se mueven a un lado y a otro.
Pero, ¡es una imagen fija!
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